
La mediación escolar consiste en trabajar con toda la comunidad educativa de un centro escolar. Es una forma de prevenir futuros conflictos, que puedan agravarse o enquistarse, y de tener una mayor conciencia de la realidad del centro, así como un fortalecimiento y potencialización de determinados valores sociales como la asertividad, justicia, comunicación, escucha, aceptación de los demás, etc
La experiencia que hemos tenido en distintos centros de la Comunidad de Madrid ha sido muy positiva ya que se pretende responsabilizar a toda la comunidad educativa (alumnado, profesorado, directivos y padres) en las dificultades que surgen en los centros, fomentando así la responsabilidad, la cultura de diálogo y no de la violencia, y la participación activa en resolver las situaciones que se nos presentan diariamente. De esta forma no se trata de huir o evitar los conflictos que pueden surgir en los centros escolares, sino de afrontarlos de tal manera que las partes implicadas sean agentes activos para su resolución.